2004
Conjunto Residencial
Quito, Ecuador
El proyecto incluía modernizar la imagen, regular y dinamizar el ingreso vehicular de la Urbanización El Condado.
Para ello se crearon 6 vías vehiculares de entrada, claramente definidas: tres para residentes, una para visitas y dos para los socios del Quito Tenis y Golf Club. Dos salidas en el extremo sur condicionan la espera de los vehículos para que los guardias tengan el control.
La propuesta arquitectónica contempla un sofisticado friso curvo blanco de 60 metros de longitud suspendido y soportado por una columnata en el extremo norte que descansa sobre un espejo de agua desbordante.
El friso atraviesa la vía principal de acceso y se ancla en la parte superior de una columna revestida con mosaico negro y cristal de Murano de color rojo de la que fluye agua desde lo alto y que mantiene este elemento permanentemente mojado y brillante.
Las casetas para los guardias son un juego plástico de volúmenes rodeados de generosas áreas verdes, generando un espacio sencillo y ordenado que genera sensaciones más agradables para los usuarios en la zona de acceso y control.